Y punto...
Lucía Fernández
... Señal de dimensiones apenas perceptibles que por combinación de un color con otros o por elevación y depresión; se forma natural o artificialmente en una superficie.
Siete garabatos bidimensionales,
veinticuatro bosquejos acromáticos,
cinco cuadros texturados,
dos murales con dominancia de colores cálidos...
Y nunca resolví la búsqueda
de mi punto central.
Erosión eólica
Cuando se pronuncian,
las palabras son el soplo
que determina mi forma.
De oficio equilibrista
Desde chica admiro los circos,
y pensé que lo haría eternamente...
Pero empieza a aturdirme
la insistente idea de suponer
que mi vida pende y depende de un hilo.
Juego de mesa
Mis algunas aptitudes
se desvirtúan en mis actitudes
y me arraigo al desatino
para evadir el destino.
Buenos Aires
En el centro
los edificios degluten veredas…
Hasta tanto no sepa
de qué sienten apetencia,
estoy ciertamente preocupada.
Santa Fe
Voy a rezarle a la virgen
del cordón umbilical,
para que alargue y desvíe
un poco el centro.
Me cansé de que la gente
viva mirando su ombligo
Alfabetización
Es preciso instruirme a diario
para sentirme una ignorante periódica.
Intención
El color de su voz
tiñó de verde
la palabra gris.
Con gestos maratónicos
la conciencia atenta
y signos de admiración
hay que huir de la mediocridad
Inconsciente
La eterna frescura
se cuela por debajo de la puerta
congelándome las plantas de los pies,
la oscuridad de las tardes
invade las curvas de la cerradura,
la insistente bruma
avanza entre los huecos de las bisagras...
Me gusta distraerme
del otro lado del invierno,
pero es otoño,
y olvidé salir.
... Señal de dimensiones apenas perceptibles que por combinación de un color con otros o por elevación y depresión; se forma natural o artificialmente en una superficie.
Siete garabatos bidimensionales,
veinticuatro bosquejos acromáticos,
cinco cuadros texturados,
dos murales con dominancia de colores cálidos...
Y nunca resolví la búsqueda
de mi punto central.
Erosión eólica
Cuando se pronuncian,
las palabras son el soplo
que determina mi forma.
De oficio equilibrista
Desde chica admiro los circos,
y pensé que lo haría eternamente...
Pero empieza a aturdirme
la insistente idea de suponer
que mi vida pende y depende de un hilo.
Juego de mesa
Mis algunas aptitudes
se desvirtúan en mis actitudes
y me arraigo al desatino
para evadir el destino.
Buenos Aires
En el centro
los edificios degluten veredas…
Hasta tanto no sepa
de qué sienten apetencia,
estoy ciertamente preocupada.
Santa Fe
Voy a rezarle a la virgen
del cordón umbilical,
para que alargue y desvíe
un poco el centro.
Me cansé de que la gente
viva mirando su ombligo
Alfabetización
Es preciso instruirme a diario
para sentirme una ignorante periódica.
Intención
El color de su voz
tiñó de verde
la palabra gris.
Con gestos maratónicos
la conciencia atenta
y signos de admiración
hay que huir de la mediocridad
Inconsciente
La eterna frescura
se cuela por debajo de la puerta
congelándome las plantas de los pies,
la oscuridad de las tardes
invade las curvas de la cerradura,
la insistente bruma
avanza entre los huecos de las bisagras...
Me gusta distraerme
del otro lado del invierno,
pero es otoño,
y olvidé salir.